Nuestros productos merecen un cuidado especial, por ser prendas delicadas, artesanales y en su mayoría de fibras naturales.
DENIM:
El denim debe su aspecto a una técnica de coloración, por lo que al lavarlo puede desprender pigmentos de color. Se recomienda lavarlo siempre del revés. Lavar por separado los colores oscuros e intensos (rojo, índigo, negro) y utilizar programas con agua fría.
LANA:
La lana es una fibra proteíca de origen animal. Su contacto con el agua puede generar encogimiento, deformación del tejido o apelmazamiento de la fibra. Por este motivo, se recomienda la limpieza en seco en tintorerías tradicionales. La lana es un buen aislante térmico y tiene gran poder absorbente, aunque baja resistencia al frote, lo que puede generar pilling.
ALGODÓN:
El algodón es una fibra celulósica de origen natural que presenta un porcentaje natural de encogimiento. Se recomienda el lavado con agua fría (sin temperatura) y de manera manual. Tiene buena resistencia a la plancha media/alta, es fresco y de alta durabilidad. Si la prenda tiene color, se sugiere lavarla por separado la primera vez.
SEDA:
La seda es una fibra proteíca de origen animal. El contacto con el agua no es recomendable, ya que puede perder el brillo original y la textura suave de la fibra, volviéndose áspera al tacto. Se sugiere realizar limpieza en seco en tintorerías tradicionales.
SINTÉTICOS:
(Fibras como poliéster, poliamida, elastano) Estas fibras tienen buena resistencia al lavado manual y no suelen encogerse ni deformarse debido a su origen sintético.
Nuestros saris de poliamida, teñidos artesanalmente con tintes naturales, tienen baja solidez de color. Se recomienda secarlos siempre a la sombra y no plancharlos, ya que son muy sensibles al calor.
En el caso del poliéster, permite planchado a temperaturas muy bajas. (Consultar siempre las etiquetas internas para mayor precisión).
ARTIFICIALES:
(Fibras como rayón, acetato, viscosa) Estas fibras regeneradas tienden a deformarse, especialmente la viscosa, que tiene baja resistencia cuando está húmeda. Fijan bien los colores, pero requieren cuidado adicional.
LAVADO:
Utilizar jabón neutro líquido o detergente para ropa, ya que son menos corrosivos que el jabón en polvo.
Evitar temperaturas altas, ya que dañan los tejidos.
Disolver bien el detergente o jabón en el agua para prevenir manchas.
Lavar los colores fuertes (rojo, azul, negro, etc.) por separado.
No dejar las prendas en remojo, especialmente si tienen aplicaciones metálicas o bordados intensos.
Las prendas con aplicaciones (lentejuelas, canutillos) requieren un lavado delicado. Si está permitido el lavado en la etiqueta, hacerlo siempre del revés y con suavidad para evitar el desprendimiento de los detalles.
LAVADO EN SECO:
Realizar la limpieza en seco en tintorerías tradicionales (no express).
SECADO:
Las prendas de viscosa deben secarse sobre una superficie horizontal para evitar deformaciones o estiramientos, ya que esta fibra es inestable.
Colgar las prendas a la sombra para evitar pérdida o disminución de color.
PLANCHADO:
No planchar sobre estampas.
No planchar prendas 100% poliamida, ya que no resisten el calor.
No usar plancha a vapor en prendas que requieran temperatura baja, ya que puede dañar las fibras.
Respetar siempre las instrucciones de las etiquetas internas para garantizar la correcta conservación de las prendas durante su vida útil.